Otro estado se suma a la preocupación por la crisis en la frontera sur de Estados Unidos. El sábado, el gobernador de Tennessee, Bill Lee, anunció que la Guardia Nacional de su estado se sumaría a las fuerzas del orden público que serán enviadas a Texas para prestar apoyo en el control migratorio, al mismo tiempo que criticó la mala gestión del gobierno federal.
Lee, que es republicano, visitó la frontera sur en Eagle Pass, Texas, a principios de este mes y luego se reunió con miembros de la Guardia Nacional de Tennessee en la Armería de la Guardia Nacional del Ejército de Millington, Tennessee antes de su despliegue voluntario, según consignó New York Post.
“Mientras Estados Unidos enfrenta la crisis fronteriza más grave en décadas, Tennessee está mostrando al resto del país lo que significa liderar”, publicó el gobernador Lee en X (antes Twitter). “Hoy me uní a los miembros de la Guardia Nacional que pronto se desplegarán de manera voluntaria con la misión de asegurar la frontera sur mientras el gobierno federal no actúa”, agregó.
En ese sentido, el despliegue inicial del personal estará conformado por 50 miembros durante marzo, antes de que una segunda tanda los reemplace más adelante durante la primavera boreal. No obstante, no se precisó a qué parte de la frontera serían enviados.
En un intento por demostrar su respaldo a Abbott y a sus medidas por restringir el ingreso de migrantes a través de los pasos fronterizos en su estado, durante la visita de Lee a Eagle Pass, también se reunió con la gobernadora de Arkansas, Sarah Huckabee Sanders, el gobernador de Luisiana, Jeff Landry, y otros republicanos.
Desde hace más de un año, Abbott se enfrenta públicamente a la Administración del presidente Joe Biden y acusa al gobierno federal de no ser lo suficientemente duro con las medidas para evitar los cruces ilegales de migrantes.
Tan solo en diciembre del año pasado, la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos informó que hubo más de 300 mil ingresos, una cifra histórica. Varios políticos del Partido Republicano critican a la Administración Biden por revertir las medidas adoptadas durante el gobierno de Donald Trump, lo que, en criterio de ellos, desató una crisis en la frontera sur del país con numerosos contingentes de inmigrantes que ingresan al país de manera ilegal.
En tanto, Biden se defiende públicamente de las críticas y sostiene que los republicanos intentan culparlo a él y a su Administración de la crisis migratoria.
Tanto Biden como el expresidente Trump reconocen que la crisis migratoria de uno de los temas que más preocupa a los estadounidenses y será uno de los más comentados durante la campaña presidencial de ambos este año.
Recientemente, los dos políticos visitaron Texas y expresaron su preocupación. Mientras que Biden insiste en los esfuerzos del Partido Demócrata por buscar soluciones a la crisis que, según los sondeos, es la mayor preocupación, Trump crítica al presidente, elogia a Abbott y sostiene que la migración es una “invasión” que está “matando a nuestros ciudadanos”.
LA NACION