ATLANTA (enviado especial).- Las puertas del Mercedes Benz abrieron unas cuatro horas antes del comienzo del partido inicial de la Copa América. La marea de camisetas argentinas empezó a llenar de a poco el imponente estadio que hoy se colmó por 71.000 personas. El fútbol de nuestro país estará representado en el césped por los campeones del mundo. Pero el contraste entre la sede inaugural en la capital de Georgia y las canchas argentinas es sideral.
Mientras esperaban por la ceremonia de apertura de la competencia y el inicio del partido del último campeón, los hinchas presentes disfrutaron de todas las distracciones y entretenimientos que ofrecen los grandes eventos deportivos estadounidenses, como el fútbol americano o la NBA.
Por los pasillos de este estadio que se inauguró en 2017 hay bares de vodka o whisky, cajeros automáticos, cargadores de celulares, autos de lujo en exposición, comidas de todo tipo y hasta máquinas de gaseosa para recargar los vasos cuántas veces uno quiera. Cualquier semejanza con el fútbol argentino es total ficción.
Los precios: una cerveza, tirada o de lata, puede costar entre US$8 y US$15, según la marca. Una medida doble de whisky: US$19. La gaseosa con refill en cualquier punto del estadio se consigue por US$2. Una caja grande pochoclos cuesta US$9 y una hamburguesa, US$10. Una porción grande de nachos, US$18 dólares; y unos tacos, US$9.
La tienda oficial de camisetas estaba explotada de hinchas en la previa. La número 10 del capitán Leo Messi se vendía como pan caliente. El precio: US$160. La camiseta albiceleste sin número costaba US$130. Afuera del estadio, las camisetas no oficiales de la selección se conseguían a partir de US$40.
El ingreso al estadio es únicamente con el código QR que se escanea desde el celular. Pese a la cantidad de asistentes, no hay policías en el interior. Solo algunos guardias de seguridad privados y personal para asistir al público.
Tal como publicó LA NACION, el imponente estadio es la casa del Atlanta United, de la MLS; y de los Atlanta Falcons, de la NFL, y tiene césped sintético. La liga de fútbol estadounidense y también la de la Confederación de Norteamérica, Centroamérica y el Caribe de Fútbol (Concacaf) permiten los partidos en este tipo de superficie. Pero para la Copa América, que arranca esta noche en este escenario, decidieron plantar césped natural. Aunque no fue confirmado oficialmente, la petición de instalarlo habría surgido desde la delegación argentina. Una concesión a la figura más convocante. Y, también, para no mostrar esta superficie artificial en el partido inaugural que será seguido por millones de espectadores en todo el mundo, acostumbrados a otro tipo de campo de juego.
Más allá de la maquinaria que ponen en marcha los estadounidenses para organizar con eficiencia eventos de este tipo, el tema aquí fue que el cambio de superficie se realizó tres días antes del partido Argentina-Canadá, algo que preocupó al técnico Lionel Scaloni.
En su experiencia norteamericana, Messi y su Inter Miami juegan en seis estadios con piso de alfombra. Los compromisos que tienen los dueños del estadio hicieron imposible que la instalación fuera más temprano. Antes del partido del Atlanta United, además, aquí tocaron los Rolling Stones (el 7 de junio).
Más allá del maquillaje que puedan lograr en 24 horas, lo cierto es que este jueves el césped no estará al cien por ciento. La parte más complicada se verá en las uniones de los panes que cruzan la cancha de arco a arco.
Lujo y tecnología
El Mercedes Benz fue construido en 2017 y costó cerca de US$1500 millones. Cuenta con techo retráctil compuesto por ocho piezas triangulares traslúcidas que se deslizan en línea recta. La estructura está hecha con más de 18.000 hojas de acero.
El estadio recibirá además el encuentro que disputará Estados Unidos frente a Panamá el próximo 27 de junio. También fue designado como sede de la próxima Copa del Mundo, que se disputará dentro de dos años en Estados Unidos, México y Canadá. Albergará en total ocho encuentros mundialistas, incluida una de las semifinales.
La mole de acero que se divisa a varias cuadras de distancia fue diseñada por el estudio de arquitectura Hellmuth, Obata & Kassabaum y cuando se inauguró fue el primer estadio en alcanzar la certificación de edificios sostenibles, desarrollado por el Consejo de la Construcción Verde de Estados Unidos.
El Mercedes Benz cuenta con la pantalla de 360 grados más grande del mundo. Se trata de una mega estructura de casi 6000 metros cuadrados y 2000 pantallas colocadas a más de 17 metros de altura.