Hace algunas semanas, Tamara Báez expresó su alegría por lo que había sido una cirugía estética que anhelo durante mucho tiempo y que logró realizarse. Sin embargo, éste la habría traído algunos problemas menores, pero de los que debe ocuparse ante el cambio que transita su cuerpo.
Mediante sus redes sociales, Tamara Báez, la ex pareja de L-Gante, contó que se realizó una cirugía estética. Es que pasó por el quirófano y se aumentó los bustos, por lo expresó con alegría este proceso, ya que desde hace tiempo que tenía el deseo de realizar este cambio en su cuerpo.
“Gente, no puedo creer que tengo tetas. Me desperté de la anestesia llorando de la alegría y ahora creo que no caigo, o sea. Estoy muy feliz”, expresó en su cuenta de Instagram al despertar de la cirugía. En su emoción por esto se podía ver que existía un profundo deseo de realizar este cambio.
En esta sintonía, Tamara Báez mostró no sólo los detalles apenas salió de la operación sino que también cómo fueron los días siguientes. Es que incluso se mostró junto a su hija mientras se recuperaba: “Mi vida, fanática de su tetita. Te amo, perdón por esto, ya va a estar bien mamá”.
Con el correr de los días, la influencer comenzó a vivir el verdadero cambio. Es que luego de verse por primera vez, su cuerpo debía acostumbrarse a este cambio. Es por eso que contó que tuvo algunos inconvenientes menores que deberá resolver de ahora en más.
Se debe a que en su Instagram mostró que está teniendo problemas con algunos corpiños, ya que ante el aumento de sus bustos no estarían resistiendo. “El corpiño no estaría soportando”, escribió la ex de L-Gante, acompañando su foto con algunos emojis para exponer que le causaba gracia la situación.
De este modo, más allá de la risa que le generó la situación, Tamara Báez terminó dejando entrever que no todo es alegría tras la cirugía estética que se realizó, sino que también debe afrontar algunos inconvenientes típicos por la variante en el talle de sostén.