Detrás de esa actriz adorada por sus recordados papeles y querida por la linda pareja que forma con Nico Vázquez existe una Gimena Accardi que pocos conocen. Es que en La Noche Perfecta, la invitaron a contar una anécdota desconocida de la vez que se vengó de una ex pareja.
Es que Gimena Accardi visitó el programa de Sebastián Wainraich y debió afrontarse a preguntas picantes. “Te tengo en La Noche Perfecta y tengo la pregunta imperfecta para Gimena. Todos tenemos imperfecciones querida, ¿Se puede decir que la tuya es que sos o eras, un poco vengativa?”, consultó el conductor.
Ante el desconcierto de la actriz, debió darle el pie para que pueda comenzar a desarrollar la anécdota: “Una vez un novio te dejó y tomaste represalia”. Ahí ella se percató de qué le hablaba, por lo que intentó aclarar: “Yo antes quiero decir qué…”. A lo que Wainraich, sabiendo que se venía la historia, se entusiasmó y advirtió: “Se ataja Gimena Accardi…”.
Es que si bien se mostró predispuesta a contar qué fue lo que sucedió, primero intentó dar explicaciones para tratar de justificar su accionar de cuando aún era muy joven: “De verdad que soy muy imperfecta, pero no soy vengativa realmente. Sólo que en ese momento estaba muy dolida”.
De este modo, Gimena Accardi se lanzó a contar cómo fue que se vengó de su ex pareja: “Contexto: Primer amor, 17 o 18 años y él me deja de un día para el otro con un tupé total. Yo era bárbara la verdad, todavía al día de hoy no entiendo cómo me dejó. Y yo realmente sufrí como una condenada”.
“Un día coincidimos en un mismo barcito, una especie de boliche, y él me ignoró toda la noche. Yo estaba muerta, ¡Me ignoró! Y ahí me malentoné, salí del bar con mis amigas y estaba su auto estacionado en la puerta”, expuso dando a entender que fue la señal de que algo debía hacer.
Por lo que la ex de Nico Vázquez confesó qué hizo: “Era un escort verde. Yo salí, chicos, nunca en mi vida hice algo así. No lo hagan en sus casas, no está bueno. No está bien lo que voy a contar”. Y procedió a revelar el final de la anécdota: “Agarré las llaves de mi cartera y se lo rayé de lado a lado. Después me fui caminando como una lady, pero sentí una sensación de felicidad total”.