Luego de los incidentes que ocurrieron en los cuartos de final entre Boca y Gimnasia y Esgrima La Plata, que provocaron destrozos en el Coloso Marcelo Bielsa, la dirigencia de Newell’s informó que los gastos ocasionados serán cubiertos por la organización de la Copa Argentina, llevándole tranquilidad a sus hinchas.
Durante el inicio del segundo tiempo, una pelea entre las barras y la policía desató el caos en el estadio, pero, la intervención de Juan Román Riquelme fue clave para evitar una tragedia, calmando los ánimos en medio del enfrentamiento.
A pesar de la rápida acción de Riquelme para detener la situación, los destrozos en el estadio dejaron una gran preocupación en Newell’s, club que había alquilado su estadio para el evento. Los baños, butacas y vidrios fueron algunos de los principales sectores afectados.
Ante el malestar de los socios y simpatizantes leprosos, el club emitió un comunicado asegurando que los gastos de reparación serán cubiertos por la organización de la Copa Argentina, una vez que se constate el estado final de las instalaciones.
El presidente de la Lepra, Ignacio Astore, detalló los daños sufridos, mencionando que “se rompieron casi todos los baños del Hipódromo y del Palomar”, así como vidrios de palcos y alambrados.
Además, expresó su preocupación por el corto tiempo disponible para restaurar el estadio, ya que el equipo tiene un partido programado para el sábado en la misma cancha.
El comunicado de Newell’s tras los destrozos en el Coloso Marcelo Bielsa
Así fueron los incidentes en cancha de Newell’s
Minutos después de que ambos equipos salgan a la cancha para comenzar el segundo tiempo, se registraron graves incidentes entre las parcialidades de Boca y Gimnaasia de La Plata.
Los primeros movimientos de violencia fueron desde la cabecera ocupada por los fanáticos de Gimnasia que comenzaron a arrojar butacas hacia la zona en donde estaban los hinchas del Xeneize. Al mismo tiempo que se peleaban ambas hinchadas, la Policía intervino lanzando gases y luego dispararon balas de goma.
A raíz de esta situación, Juan Román Riquelme bajó a la popular para poder frenar a los simpatizantes, evitando que se genere un conflicto aún más grave. Además del máximo mandatario, también se los pudo ver a Marcelo Delgado, Mauricio Serna y Raúl Cascini.
Finalmente, luego de un gran tiempo de demora, las autoridades decidieron que el cotejo debería seguir y, de la mano del árbitro Jorge Baliño, arrancaron los segundos 45 minutos de los cuartos de final de la Copa Argentina.
BP