En primer lugar y antes del desarrollo de la temática, cabe destacar la importancia de incorporar como hábito una adecuada entrada en calor para entrenar y/o competir. Los beneficios son varios e incluyen diversas aristas que compartimos con los apasionados del deporte con raqueta.
Comenzamos con las ventajas de un buen calentamiento y acondicionamiento psíquico-fisico. Cabe destacar que al realizarlo disminuimos, sin lugar a dudas, el riesgo de una posible lesión. Esto es porque despertamos y preparamos la mente y el cuerpo para la tarea específica. Además, nos ayuda en la calidad de la acciones deportivas específicas con sus gestos, desplazamientos, intensidades y demandas energéticas. El objetivo de todo tenista es encontrar el grado de activación óptima para poder cumplir con la tarea. Una buena entrada en calor debe ser progresiva y variada, con esto queremos decir que debemos ir de lo general a lo específico.
Cuando hablamos de entrada en calor general nos referimos a realizar diversos ejercicios que estimulen y despierten diversas capacidades y la estructura corpórea en cuestión.
- Movilidad articular.
- Estabilidad.
- Ejercicios de tren inferior, zona media y tren superior.
- Estimulación de los músculos sinergistas (encargados de contribuir al balance adecuado).
- Desplazamiento generales.
- Coordinación.
- Ejercicios que eleven la temperatura corporal y muscular.
Una vez realizada las variantes generales, vamos a introducirnos en el momento de entrada en calor específica.
El objetivo de este momento es que los desplazamientos, gestos e intensidades sean específicos del tenis, motivo por el cual vamos a utilizar de forma progresiva tiempos de trabajo y descanso e intensidades. Cabe destacar la importancia de trabajos sin pelota y con pelota.
- Desplazamientos específicos: en este espacio podemos ensamblar y articular ejercicios de saltos con piques que activen fibras explosivas y rápidas.
- Gestos específicos: golpes del tenis, de forma aislada y combinados.
- Reacciones a diversos estímulos con pelota de tenis.
- Ejercicios de diversos golpes con pelota: volea a volea, peloteo en 3/4 de cancha, peloteo de fondo, saque y devolución.
- Finalizar jugando puntos puede contribuir a el enfoque óptimo previo al partido.
Además, es importante incluir la activación de herramientas psicológicas, las rutinas, visualizar y la charla positiva con uno mismo son ingredientes que trabajamos dentro de la entrada en calor para que mente y cuerpo estén alineados y enfocados en un rendimiento de calidad.
En otras publicaciones vamos a hablar de consejos y tips para desarrollar herramientas psicológicas en la competencia del tenis.
A modo de conclusión, generar el hábito de una buena entrada en calor nos servirá como prevención y activación para disfrutar de jugar tenis. Ahora ya lo sabes, ¡A ponerlo en práctica!
Gonzalo Pressón es un integrante clave en el equipo formativo y de desarrollo de la AAT, y se suma al acuerdo de colaboración entre Infobae y la Asociación para ofrecerle al lector aficionado al tenis un espacio de aprendizaje. En las próximas entregas, profundizaremos acerca de la eficacia y eficiencia aplicada en otros golpes.
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