La actividad económica estadounidense apenas ha variado desde principios de septiembre, según ha afirmado la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) en su Libro Beige, documento que proporciona una evaluación de la economía detallada por los 12 bancos centrales regionales del país.
El informe ha recogido que dos de estas regiones sí se lograron anotar un crecimiento “modesto”, aunque casi todas informaron de una menor actividad industrial. De su lado, el sector bancario permaneció plano o repuntó ligeramente, incluso a pesar de que la demanda de crédito arrojase signos “mixtos”.
Después, el consumo también exhibió lecturas mixtas, con varias de las demarcaciones territoriales mostrando un “viraje” del gasto de las familias hacia opciones más baratas.
El mercado residencial habría mantenido el tipo durante el periodo analizado, aunque la incertidumbre en cuanto a los tipos desalentó a algunos compradores. A su vez, el sector inmobiliario comercial se mantuvo “plano”, con algunos apuntes positivos por la construcción de infraestructuras y centros de datos en algunos distritos.
La Fed ha constatado que la huelga en los puertos de la Costa Este de EE.UU. solo causó “incidencias menores” y de carácter “temporal”, mientras que el daño provocado por la temporada de huracanes sí ha impactado negativamente sobre cultivos, comercio y turismo en el sureste del país. En términos generales, la agricultura se mantuvo estable o ligeramente a la baja.
El Libro Beige ha indicado, además, que el sector energético se mantuvo en niveles inalterados o escorados un tanto a la baja, al tiempo que los bajos precios de la electricidad redujo los márgenes de beneficios de los productores. Aun así, los contactos de la Fed se han mostrado “algo más optimistas” sobre las perspectivas económicas a largo plazo.
En otro orden de cosas, el empleo aumentó ligeramente, ya que más de la mitad de los distritos registraron un crecimiento leve o modesto. Muchas regiones comunicaron, igualmente, un número “limitado” de despidos y una baja rotación de trabajadores.
Asimismo, los precios continuaron moderándose como atestigua el enfriamiento de los importes de venta al público, que avanzaron de manera “leve” o “modesta” en la mayor parte de demarcaciones. Estas también dieron cuenta de una ralentización en la revalorización de los salarios.