En medio de la controversia generada por la decisión del nuevo titular de la Dirección General Impositiva (DGI), Andrés Vázquez, de promover a su pareja dentro del organismo, fuentes del Poder Ejecutivo defendieron la medida.
Las repercusiones surgieron después de que el periodista Hugo Alconada Mon (La Nación) divulgara la designación, apenas una semana después del nombramiento de Vázquez al frente del organismo.
Polémica en la DGI: Andrés Vázquez asciende a su pareja y defiende la decisión
Vázquez favoreció a su pareja, María Eugenia Fanelli, “saltándose rangos intermedios” para designarla como jefa de la Dirección Regional Centro II en la ciudad de Buenos Aires. Con este ascenso, el salario de Fanelli aumentó de aproximadamente $ 4,2 millones a alrededor de $ 8,4 millones, según la investigación periodística.
En medio de las repercusiones, fuentes del Ejecutivo ofrecieron una sólida defensa de la decisión al argumentar que la pareja de Vázquez “es una mujer de carrera, con más de 30 años en el organismo (Fanelli tiene 44 años). Sin ir más lejos, se conocieron trabajando allí”.
Cabe destacar que el código de ética interno del organismo desaconseja explícitamente favorecer a familiares y allegados. Sin embargo, una alta fuente del Gobierno subrayó: “Para llevar a cabo la purga que estamos haciendo, se necesita gente de confianza“.
“Es alguien que sabe lo que está haciendo”, fue otra de las frases utilizadas desde las diversas terminales del Gobierno. “Tiene tres décadas allí, está más que capacitada para lo que tiene que hacer”, añadían.
“Es razonable que quiera conformar un equipo con gente de confianza, como hizo Martín Menem (titular de la Cámara de Diputados) con Sharif (Menem, su sobrino y mano derecha en el Congreso)”, añadieron como ejemplo desde el primer piso de la sede de Gobierno.
Ascenso controvertido y denuncias judiciales en su contra
La designación del nuevo titular de la DGI fue firmada por el presidente Javier Milei y la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, quien firmó con delegación por el viaje del ministro de Economía, Luis Caputo. Sin embargo, no contaba con la firma del jefe de Gabinete, Guillermo Francos, ni de la entonces titular de la AFIP, Florencia Misrahi.
Consultados por el medio, desde la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) optaron por no brindar una respuesta. “No haremos comentarios sobre el titular de la DGI, Andrés Vázquez, ni sobre su esposa, María Eugenia Fanelli“, señalaron.
Vázquez es una figura enigmática y controvertida. Se conocen pocas imágenes de su rostro y, además, no ha otorgado entrevistas.
El mes pasado, fue denunciado ante la Justicia tras una investigación periodística realizada por el Centro Latinoamericano de Investigación Periodística (CLIP), con el apoyo del Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ).
La investigación reveló que en 2013 compró tres departamentos en Miami por unos 2 millones de dólares, los cuales nunca fueron declarados en las declaraciones juradas que está obligado a presentar ante la Oficina Anticorrupción (OA).
Cuando asumió al frente de la DGI, aún era dueño de dos de esos tres inmuebles, cuyo valor supera los 1,6 millones de dólares.
Ahora, la designación de Fanelli ha generado controversia dentro del organismo tributario. Ha sido calificada como “inusual” y “anormal”, con algunos considerando que podría entrar en conflicto con el código de ética interno o representar una “incompatibilidad manifiesta”, según indicaron cuatro fuentes de la AFIP que ocuparon cargos de relevancia durante los gobiernos de Milei, Alberto Fernández y Mauricio Macri.