España concentra una cifra cercana a los 20.000 adultos mayores que superaron los 100 años, de los cuales 2000 (el porcentaje más importante) están en Galicia. Una investigación que inició a principios de este 2025 pretende conocer cada caso y registrarlo en un archivo nacional, con el fin de conocer qué hábitos son los que le permitieron a estas personas superar livianamente el centenario.
Ya no es sorpresa que una vecina gallega cumpla 91 o 95 años, ahora la novedad sucede a los 100. La esperanza de vida entre el grupo de personas se corrió casi dos décadas y lejos de permanecer en asilos o quietos en sus casas, eligen caminar, tener una vida social y participar activamente de las propuestas de sus municipios.
Un informe de Antena 3 de febrero de 2025 evidenció la vida de estos longevos, quienes, entre ellos, discuten por cuál hace más o cuánto más joven pueden percibirse. Este fenómeno no se atañe solamente a España, sino que en otros países de Europa el envejecimiento poblacional se interpuso en la agenda pública de varias administraciones.
Pilar Rodríguez Ledo, médica y presidenta de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG), es una de las encargadas del proyecto Renace, que pretende hallar el secreto de la “eterna juventud”, algo que muchos anhelan, pero que de momento unos pocos alcanzaron.
Esta investigación, que rápidamente ganó fama internacional, es llevada a cabo por un equipo interdisciplinar gallego. De hallarse una respuesta vinculada al ADN, podría abrir un camino de esperanza para que más personas lleguen a los 100 años. “Queremos entender los factores que se relacionan con la longevidad extrema y aprender de estas personas que son auténticos supervivientes de su época”, sostuvo Ledo.
El estudio se centró en 80 casos de toda España y una de las características similares es que todos los individuos analizados corresponden a residentes de pueblos o ciudades pequeñas, lejos del estrés de las grandes urbes.
“Viven de forma activa, saben leer y escribir desde jóvenes, no han fumado y no han sufrido grandes enfermedades, como el cáncer”, indicó Lorenzo Armenteros, uno de los médicos que participa del proyecto.
En 2011, un estudio previo a Renace llamó la atención de los científicos debido a que los centenarios de Galicia y del norte de Portugal visitaban regularmente al médico, en específico, una o dos veces al año para realizarse los chequeos de rutina, pero no a causa de alguna enfermedad. En la actualidad, Pilar Rodríguez Loredo comprobó que todavía se preserva esa costumbre, incluso remarcó que “son personas que viven en su comunidad y tienen una vida activa”.
A pesar de que el estudio continúa en proceso, algunos datos ya salieron a la luz. En particular, los expertos destacaron que aquellos adultos mayores suelen hacer ejercicio, no siempre una actividad física en específico, pero salen a caminar e incluso algunos trabajan en los huertos de sus casas.
Intentan preservar la vida social, interactúan con los vecinos y entre ellos se ayudan. También la alimentación es la base de su fórmula. Una taza de chocolate al día, beber la cantidad de agua necesaria y comer sano.
Se cree que un 30 por ciento de su secreto es la actitud con la que enfrentan cada día. Luego tiene un papel preponderante la genética y el entorno natural donde se hallan.