A partir de julio de 2025, los bancos y las administradoras de tarjetas deberán brindar más datos de los consumos realizados por sus tenedores para facilitar el control de las operaciones en el exterior.
La medida que se plasmó en la Resolución General 5662/2025 con fecha de marzo pasado, y que se hará efectiva desde el 1 de julio próximo, exige que las entidades bancarias y financieras informen detalladamente sobre cada compra realizada en el extranjero con tarjetas de crédito y débito.
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Los datos requeridos a partir del mes próximo incluyen:
- Número de tarjeta utilizada.
- Marca y país de la transacción.
- Nombre del comercio y monto de la operación.
- Código de rubro del comercio (Merchant Category Code – MCC), que clasifica las compras según el tipo de producto o servicio adquirido.
La normativa también amplía el control a las compras efectuadas por titulares adicionales de tarjetas.
Las instituciones financieras deberán adaptar sus sistemas para cumplir con estas nuevas exigencias, lo que podría aumentar la fiscalización sobre las transacciones internacionales.
Según han señalado algunos tributaristas, entre los puntos más relevantes de la resolución aparece la incorporación del Merchant Category Code (MCC), un código estandarizado utilizado en los Estados Unidos que clasifica a los comercios según la actividad que realizan.
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La mencionada categorización, basada en códigos internacionales como los de la Organización Internacional de Normalización (ISO) y el Clasificador Industrial Estándar (SIC), tiene como objetivo facilitar la segmentación de los consumos realizados en el exterior, además de mejorar la precisión del análisis de los datos fiscales.
De esta manera ARCA podrá analizar de manera más eficiente los patrones de consumo de los argentinos en el exterior, al tener información más detallada sobre los sectores de consumo.
Tal como explicó oportunamente la especialista en impuestos Elizabet Piacentini, el principal objetivo es mejorar la fiscalización y detectar inconsistencias entre los consumos y la situación fiscal de los contribuyentes.
“Se han encontrado casos de personas con planes sociales o monotributistas de categorías bajas que registraban gastos elevados en el exterior. Con esta información, ARCA podrá cruzar datos y perfilar mejor a cada contribuyente“, aseguró en declaraciones a Canal E.
Además, explicó que la base de datos de ARCA se fortalecerá con el intercambio de información bancaria con Estados Unidos, lo que permitirá un control aún más exhaustivo de las finanzas de los ciudadanos.
El endurecimiento de los controles coincide con un contexto de cambio en la estrategia de pago de los argentinos. “Antes, con el gobierno anterior, convenía más pagar con tarjeta en el exterior. Ahora, muchos prefieren llevar efectivo o pagar sus tarjetas con dólares adquiridos previamente“, explicó Piacentini.
Límites de gasto y productos restringidos
ARCA estableció montos máximos de compra para evitar el pago de impuestos en la Aduana:
a) 300 dólares para quienes regresen al país por vía terrestre (automóviles o micros).
Más allá de las restricciones, ARCA detalló que los viajeros pueden ingresar libre de impuestos un teléfono celular, una notebook o una tablet, con un máximo de una unidad por persona. También se permite traer ropa, calzado y artículos de uso personal, siempre que no tengan fines de reventa.
¿Chau a las compras internacionales?
El incesante crecimiento en el uso de tarjetas de crédito argentinas para compras en el exterior motivó al Gobierno a implementar nuevas restricciones para frenar el éxodo de gastos en el exterior, que según datos oficiales, en el caso de Chile creció más de 540% a comienzos de este año.
El analista financiero Christian Buteler incluso proyectó en sus redes de que esta nueva normativa frenaría abruptamente las compras internacionales. De todos modos, en algunos productos, la diferencia todavía sigue siendo favorable respecto de los precios en la Argentina.
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