Guillermo Tofoni es uno de los empresarios que más trabajó por el proyecto privatizador del fútbol nacional. Siempre estuvo rodeado de negocios y emprendimientos alrededor de la selección nacional desde los tiempos en los que Julio Humberto Grondona hacía y deshacía en la AFA y en la FIFA.
Por el poder en la FIFA que tenía el ferretero de Sarandí, no le faltaba razón al publicista, Tofoni, que “Don Julio” era como “un Papa argentino”, lo decía en tiempos en que Jorge Bergoglio todavía era cardenal.
El Gobierno de Javier Milei busca desregular a clubes de fútbol
Tofoni no es un hombre de negocios cualquiera, no es un arribista ni tampoco un “satélite” del titular de la AFA, Claudio Tapia, el publicista está amparado en el prestigio que le otorga ser FIFA Match Agent.
Por ese rango es que logró convertirse en un integrante del círculo rojo de la AFA, codearse con las autoridades de la FIFA y hasta, hasta haber sido nombrado en los grandes casos de corrupción del fútbol a nivel mundial, investigados por el FBI.
Los FIFA Match Agent no son muchos. Doscientos en todo el mundo que ocupan sus horas organizando partidos de selecciones nacionales con todo lo que implica el negocio del fútbol mundial y las marcas más prestigiosas del planeta que suelen ser sponsors de los encuentros. Guillermo Tofoni invirtió 200.000 francos suizos en 1998, presentó sus avales y un año después logró convertirse en el primer agente latinoamericano no sólo argentino.
Guillermo Tofoni, el empresario que puso en la mira al “Chiqui Tapia”
En 2006, con un socio de nacionalidad rusa, compró un paquete de 24 partidos por 18 millones de dólares. Un encuentro amistoso internacional entre la selección bicampeona del mundo con otro combinado significaba para la AFA una recaudación aproximada de 1,5 millón dólares de las cuales World Eleven cobró una comisión de “ten percent” (10%), como se estila en los contratos de representación en la industria del entretenimiento.
Guillermo Tofoni logró convertirse en un integrante del círculo rojo de la AFA y codearse con las autoridades de la FIFA.
Sin embargo, con la nueva conducción de la AFA, al mando de “Chiqui” Tapia surgieron los problemas y la Justicia termino dándole la razón a los dirigentes de la calle Viamonte ante los reclamos de World Eleven por no haber respetado los convenios firmados, según lo entendía Guillermo Tofoni.
Aparentemente, una formalidad hizo caer el negocio de representar a la AFA hasta el año 2030 de parte de la empresa de Tofoni. Para el juez federal, Julián Ercolini y para la Cámara Federal que ratificó el sobreseimiento del Chiqui Tapia, la explicación de los letrados de la AFA fue suficiente. Ellos señalaron que “el contrato firmado en mayo de 2021, y que en teoría regía hasta el próximo 2030, no fue refrendado por el comité ejecutivo de la AFA y no cuenta con la firma del secretario general de la entidad, Víctor Blanco. Si figura la de Tapia y la del secretario ejecutivo de la presidencia, Pablo Toviggino”. Pero eso no alcanzó por lo que la AFA nunca cedió en forma exclusiva los derechos, porque es la dueña primigenia de los mismos.
Para el estatuto de la AFA, “la firma del presidente de la institución en un contrato carece de validez si no está acompañada por la del secretario general. En este caso, Víctor Blanco, presidente de Racing”. En las actas de AFA del 29 de septiembre de 2021, consta que el Comité Ejecutivo de la entidad, rechazó la renovación.
Pues bien, luego de tantos reveses judiciales, Guillermo Tofoni tendrá revancha, y está vez, a través de interpósita persona, según lo que termine presentando en sociedad el flamante ministro de Javier Milei, Federico Sturzengger.
Privatizaciones de clubes de fútbol: los que están a favor y en contra
Los contendientes en torno a la privatización de los clubes de fútbol están posicionados. De un lado, la AFA, en casi su totalidad, Sebastián Verón de Estudiantes sería una de las raras excepciones y, del otro lado, todo el gobierno de La Libertad Avanza con Javier Milei a la cabeza, que ya demostró vocación privatizadora al publicar en el Boletín Oficial el Decreto Nª 70/24, desregulador de la economía, que autorizó el ingreso de capital privado a los clubes de fútbol, aunque su puesta en vigencia quedó sin definición, mientras hay recursos de amparo pendientes y una definición en la Corte Suprema de Justicia que todavía no se expidió.
A instancias de la legisladora Juliana Santillán y de Guillermo Tofoni, en mayo pasado, se realizó un simposio con Javier Tebas, presidente de la Liga española de fútbol, para explicar el funcionamiento de las sociedades anónimas deportivas en su país.
Lo escuchó atentamente, Federico Sturzenegger, y el secretario de turismo y deportes, Daniel Scioli.
En recientes declaraciones periodísticas, Guillermo Tofoni ya prepara su desembarco con inversores interesados en los clubes locales.
“Las sociedades anónimas en el fútbol están desde 1980 y los italianos fueron pioneros en ese sentido. La tendencia en los últimos diez años es que los grupos económicos interesados compran un club por país. Lo que hay que privilegiar es que no cualquier grupo puede estar, por más dinero que tenga, a la altura de comprar un club de fútbol”.