El gobernador de Córdoba, Martín Llaryora, rechazó la decisión del Gobierno de auditar la creación de cinco universidades nacionales, de las cuales dos pertenecen a esa provincia, y llamaron a “defender el sistema universitario”. Además, se refirió al panorama económico y consideró que si la inflación baja irá acompañada de “una recesión tremenda” y frente a la falta de “un plan productivo y social”.
“Los países crecen con educación, no sin educación. Por eso hago público mi enérgico repudio y total rechazo a la decisión del gobierno nacional de frenar la creación de la Universidad Nacional de Río Tercero, establecida por ley a través del Congreso en 2023″, sostuvo el mandatario y calificó como “tremendamente lamentable” la medida anunciada ayer por el vocero presidencial, Manuel Adorni, de “revisar y auditar la creación de cinco universidades nacionales”, entre las que además se cuentan la Universidad de las Madres de Plaza de Mayo, la de Ezeiza, la del Delta, la de Pilar.
En esa línea, señaló que los habitantes de la ciudad cordobesa que va a albergar a la nueva institución académica “no se merecen que se les corte este proyecto universitario”. Los dichos ocurrieron durante un acto por la ampliación presupuestaria para el Boleto Educativo Cordobés y el Boleto Obrero Social, del que participó el intendente de Río Tercero, Marcos Ferrer.
El gobernador recalcó que en su provincia “la pertenencia a distintos partidos políticos no impide el trabajo conjunto y colaborativo” y aseguró a Ferrer que podrá “contar con el apoyo” de su administración “para que Córdoba defienda al sistema universitario y a la Universidad de Río Tercero”.
Por otra parte, en medio del conflicto del Ejecutivo nacional con las provincias por el recorte de fondos y en la previa al discurso de apertura de sesiones en el Congreso, Llaryora se mostró con expectativas de que el mandatario haga un llamado al diálogo “para construir consensos y evitar que las situaciones se vuelvan más dolorosas” frente a un escenario económico dificultoso.
En declaraciones a Canal 12, el titular del Ejecutivo cordobés estimó que Milei “tiene que bajar los cambios y entender que el discurso de campaña sirvió para la campaña”. “Ahora tiene que gobernar, y cuando te toca gobernar todo se hace más difícil, no para el Presidente, sino para la gente cuando no puedes dialogar ni reunir consensos”.
En ese sentido, el sucesor de Juan Schiaretti reparó en la importancia de “acomodar la macroeconomía y bajar la inflación”, aunque remarcó que “sin un plan productivo y social, va a bajar con una recesión tremenda, con pérdidas del empleo, pérdidas de salarios reales”, y que ese contexto va “a terminar estresando al sector público”.
Esas circunstancias, según observó, “ya están ocurriendo por la difícil situación social” y puso como ejemplo que en la provincia que gobierna “ya se está ampliando beneficios del boleto obrero, social y educativo y se está dando un crecimiento de la atención en la salud pública por la gente que no puede sostener la obra social. “Hay empresas en Argentina que están cerrando y en Córdoba se están suspendiendo empleados”, señaló.
En tanto, cuestionó al Gobierno por no girar los fondos para el pago de los haberes a los jubilados -que por convenio debe enviar para compensar el déficit de la Caja de Jubilaciones de la provincia-, así como la decisión de eliminar el Fondo Nacional del Incentivo Docente (Fonid) y los subsidios al transporte.
LA NACION